Tras atar cabos, el litio fue uno de los elementos centrales para dar el golpe de Estado de noviembre de 2019 que llevó a Jeanine Áñez al poder, por los intereses económicos extranjeros y locales que implica esta riqueza natural que posee Bolivia, afirmó el candidato a la presidencia por el MAS-IPSP, Luis Arce Catacora.
“Uno empieza a atar cabos y claramente se da cuenta de los intereses económicos que estaban detrás, el lito y lo dijimos en su momento, era uno de los elementos centrales para el golpe de Estado. Esos eran intereses extranjeros”, pero también hubo intereses nacionales, dijo a radio Kausachun Coca.
El presidenciable explicó que sobre ese metal en el país hoy se develan varias cosas como las declaraciones del ex ministro de Gonzalo Sánchez de Lozada, el ‘Zorro’ Carlos Sánchez Berzaín que se encuentra prófugo de la justicia boliviana en Estados Unidos o del candidato a la vicepresidencia por Juntos Samuel Doria Medina o del dueño y fundador de la empresa estadounidense de autos eléctricos, Tesla, Elon Mussk, quien afirmó haber participado en el golpe de Estado en Bolivia, en noviembre de 2019, con el propósito de apropiarse del litio.
El objetivo de Mussk sería la gran reserva de litio que tiene Bolivia en su zona andina, principal materia prima para el desarrollo de baterías eléctricas de gran almacenamiento y que el magnate ve como una fuente para multiplicar las ventas de sus automóviles de lujo.
“Recordemos que Samuel Doria Medina dijo que sería interesante que Tesla venga a operar en Bolivia”, afirmó Arce. En este contexto recordó que durante el Gobierno de Jaime Paz Zamora (1989-1993), catalogado como neoliberal, se intentó otorgar la explotación del litio a la multinacional estadounidense Lithium Corporation of America, a lo cual, principalmente el pueblo potosino, se opuso y una huelga de hambre de las organizaciones de defensa de los recursos naturales impidió que se consuma dicho plan.
Las estimaciones establecen que el inmenso mar de sal de Uyuni concentra más del 60% del litio que existe en el mundo, con 10.000 kilómetros cuadrados en la región andina de Potosí (suroeste).
Según Arce, hoy el mundo vive una crisis energética por el recurso no renovable que es el petróleo, y uno de esos elementos tiene que ver ahora con un recambio en la matriz energética por otra fuente que sea renovable a través de la acumulación de energía en una batería de litio.
El candidato del MAS también explicó que en el golpe de Estado los intereses nacionales se manifestaron a través del apoyo de empresarios privados, quienes por su ambición ahora pretenden tomar parte de los grandes negocios de Bolivia como nación, en este caso del litio y hacerse cargo de grandes obras de manera directa sin licitaciones, además de la condonación dolosa de sus deudas en materia de impuestos.
“Uno de los intereses nacionales era las deudas con el fisco, con impuestos nacionales que se tenía de varias empresas y que luego del golpe están desapareciendo misteriosamente esas deudas. Cuando la recaudación tributaria cae, están desapareciendo esas deudas de varios empresarios que han participado activamente en el golpe de Estado de noviembre pasado”, señaló.
Por lo tanto, dijo, ese es un tema que también reflejaba los intereses nacionales de algún sector empresarial en Bolivia “que quería retornar al poder luego de 14 años para volver a repetir la triste historia del país de los años pasados que es la historia que hoy estamos viendo” de enajenación de empresas como Entel, YPFB y otras.
Agencias